lunes, 5 de julio de 2010

liberación


Bueeeno, pues yastá. El sábado presentamos y creo que salimos con la testa bien alta.
La noche anterior estuvimos: lost in translation, cinemaaddict, rebecca alias the journalist y el mendas, aporreando el teclao y peleándonos con una puta regla de tres que no había forma humana de sacar. Sufrimos el clásico momento de fundición de plomos cerebrales y un lamento de lost in translation: ¡NECESITO UN CEREBRO QUE FUNCIONE, SÓLO UNO... SOMOS CUATRO Y AQUÍ NO PUEDE PENSAR NI DIOS!
Aclaremos aquí que los cuatro componentes venimos de la rama de letras putas totales y que en cuanto se nos pone un porcentaje delante del jeto se desata una furia de alergias difícil de controlar.
Pudimos con el porcentaje y con la madre que lo parió y nos fuimos a tomar algo con el resto de integrantes del máster, por aquello de fer germanor y de desestresarse un rato.
Nos echamos unas risas con los tutores que nos acompañaban durante la velada.
Advertising girl nos dice que detrás de la puerta de su habitación hay un rótulo que reza: manifestación de mosquitos y en su base hay un material adherente el cual es una absoluta guarrería porque se han quedao un montón de bichos pegaus ahí. Al oir esto, niguno de los compañeros se atreve a ir y tirarle un piano de cola a modo de trasto porque saben que al entrar en su habitación se quedarán enganchaus detrás de la puerta. A tenor de las animaladas que íbamos soltando, uno de los profes quería saber si lo que se fumaba ahí era sólo tabaco.
Y a éso de la una, cuando la euforia, los nirvis y el cansameng se rejuntan y te pegan un meneo: decidí ponerme el sello en la frente y meterme en el sobre.
Creo que dormí a plazos. Y obviamente me desperté varias veces para visitar el excusado.
Por la mañanita me bajo a desayunar y me reúno con mis compis. Todos estamos más o menos en el mismo estado: entre catatonia y tembleque nervioso.
Nosotros somos el primer grupo en presentar, hacemos cuatro estiramientos y salimos al ruedo.
Creo que toreamos la situación de una forma bastante digna (ni vomitamos, ni nos defecamos, ni nos miccionamos "life").
Se han acabao las pringadas findesemaneras, a planchar oreja hasta la hora que quiera. ¡Qué respiro! Me siento liviano. Hasta peso menos y todo.

toppolicenciao