
esta mañana me he levantao con dos carámbanos pegaos en la tocha.
No me va nada bien. Para quitármelos he tenido que coger el cuchillo jamonero y hacer palanca. Como peligraba mi integridad física, he decidido pasarme por agua hirviendo. Se me han desenganchao, menos mal. A ver con qué jeto salgo a la calle. Si de normal ya soy difícil de mirar, no me imagino qué más sustos podría llegar a dar. Tendría que salir equipao con el desfibrilador en la mochila. Quita, quita.
toppocongelao
3 comentarios:
GENIAL!!! me ha encantado mucho, no muchisimo, jajaja, me he partido imaginandomelo y sobre todo con el desfibrilador en la mochila...que bonito!!!
Ja,ja,ja,ja,ja,ja!!! Topogenial! :-)
Sílvia.
aquí ni t'explic. ha nevat molt.
eso sí, prevención prevención anti carámbano es lo mejor, eh. :)
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